Automedicación y los riesgos asociados

Según la Organización Mundial de la Salud, las prácticas de medicación poco seguras, como la automedicación, son una de las principales causas de lesiones, intoxicaciones y daño evitable. ¿Sueles consumir medicamentos sin prescripción? Te contamos la importancia de frenar este hábito. 

La automedicación consiste en tratar una enfermedad, síntoma o malestar, sin la supervisión ni la prescripción de un médico o profesional de la salud autorizado. 

Respecto a este problema global, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS, ha advertido que “los medicamentos son herramientas eficaces para proteger la salud, sin embargo, los que se toman de forma incorrecta o son de mala calidad, pueden causar daños graves”.  

En cuanto a la realidad en Chile, el Instituto de Salud Pública informó en 2021 que el 50% de los medicamentos más consumidos en ese momento en el país eran analgésicos o antiinflamatorios de venta libre, como el paracetamol, ibuprofeno o naproxeno, tendencia que sigue manteniéndose hasta la actualidad. 

¿Sueles tomar medicamentos sin supervisión médica? Este hábito puede tener consecuencias a corto, mediano y largo plazo para tu salud. ¡Sigue leyendo para informarte! 

¿Cómo puede afectar la automedicación?

Tomar medicamentos de forma habitual, sin la supervisión de un médico puede tener distintos efectos. 

Como explicó el Dr. Joseph I. Gómez, Jefe del Servicio de Urgencias de Andes Salud El Loa, “el consumo inadecuado de medicamentos puede producir efectos adversos como no lograr el objetivo deseado por dosis inadecuadas, generar resistencia a los medicamentos y también pueden darse interacciones entre medicamentos que podrían ser perjudiciales, como lo que ocurre con el uso no supervisado de antibióticos, muchas veces llevando a un retraso de un diagnóstico y la detección tardía de alguna enfermedad ”. 

Junto con lo anterior, la automedicación puede perjudicar la salud de distintos órganos, como: 

• Hígado: el hígado metaboliza la mayoría de los medicamentos, y el uso excesivo o prolongado de ciertos fármacos, como el paracetamol, puede provocar daño hepático. 
• Riñones: la automedicación con antiinflamatorios no esteroides como el ibuprofeno o el naproxeno, especialmente en dosis altas y por períodos prolongados, pueden causar problemas renales, incluyendo la insuficiencia renal aguda, entre otras complicaciones. 
• Estómago e intestinos: los antiinflamatorios no esteroides también pueden causar daño en el revestimiento del estómago e intestinos, aumentando el riesgo de úlceras, sangrado gastrointestinal y otros trastornos digestivos.
• Corazón: algunos medicamentos utilizados de manera incorrecta, como ciertos tipos de estimulantes o fármacos para el corazón, pueden causar arritmias cardíacas o daño en el músculo cardíaco.
• Sistema nervioso central: la automedicación con psicotrópicos, como tranquilizantes o antidepresivos, puede afectar el funcionamiento del sistema nervioso central y causar efectos secundarios graves, como cambios en el estado de ánimo, mareos, confusión o incluso convulsiones.

¿Qué considerar a la hora de consumir medicamentos?

Para evitar los efectos adversos descritos anteriormente, es clave recordar siempre: 

• Acudir a tu médico si tienes síntomas o problemas de salud recurrentes.
• En caso de que sean indicados, compra medicamentos en establecimientos autorizados.
• Revisa la fecha de vencimiento en la caja. 
• Consume medicamentos sólo en el periodo indicado por el médico 

¿Necesitas una orientación personalizada respecto a este tema? En Andes Salud contamos con equipos multidisciplinarios de profesionales con amplia experiencia en el cuidado integral de tu salud. ¡Te esperamos!